En verano tomamos el sol, ya sea directa o indirectamente. Ya sea que te has cogido unas vacaciones o ya sea que estás andando por la calle, el sol hace mella en la piel de la cara como en ninguna otra parte del cuerpo.
Además, si estamos cerca del mar, la salinidad del ambiente acabará por resecar también nuestro cutis.
Antes de que sea tarde, es primordial una buena hidratación. De lo contrario, nos costará mucho más reparar el daño que esta época del año causa en nuestros tejidos.
Muchas cremas consiguen hidratarnos y tenemos la falsa sencación de haber conseguido que no se estropee la piel, pero realmente no está reparada, solamente hidratada y, aunque es la parte esencial para no acabar con la cara áspera como una lija, no es lo único que debemos hacer por la piel más delicada de nuestro cuerpo. Si únicamente te hidratas, cuando bajes la guardia, te encontrarás con la desagradable sorpresa.
En Cuidadicos.es os recomendamos el uso de una crema reparadora como tratamiento preventivo de la sequedad facial.
¿Y tú? ¿Solo te hidratas? ¿Y por qué no cuidas la piel de tu cara como se merece?
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